Aunque ya protagonizó una serie de televisión, Anthony Mackie está emocionado por su primera película como Capitán América, Capitán América: Brave New World. Sin embargo, pese a que ya han pasado unos cuantos años desde que Sam Wilson heredó el estudio, muchos aún le comparan con Steve Rogers, tanto para bien como para mal.
Durante un evento de Disney en Singapur, Mackie entró en detalle sobre las diferencias que existen entre Wilson y Rogers, que para él van más allá de simplemente tener o no tener suero de súper soldado.
La evolución de Sam es sencilla. Sigue siendo consejero, sigue sirviendo en el ejército, pero al mismo tiempo, ahora es un líder de su comunidad en el país.
Obviamente, no tener el suero corriendo por sus venas puede parecer una desventaja, pero Mackie dice que Sam Wilson lo compensa sobradamente con estrategia.
Es muy diferente con el suero, puedes luchar contra cualquiera. Cuando no tienes el suero, tienes que ser inteligente y diseñar diferentes formas de derrotar a los enemigos. Con Sam, siendo un consejero, usa más su cerebro que su fuerza. Usa más su ingenio que su puño. Es más amigo de todos.
Otra forma de compensar la ausencia de súper poderes es el uso de tecnología, la cual ya venía manejando cuando era el Halcón (Falcon).
Es un traje de alta tecnología. Fui a Wakanda, me reuní con todos allí, cenamos. Fue un momento genial. Me organizaron una fiesta de bienvenida. Fue genial. Pero cuando me iba, me dieron un traje, ¿no? Me lo puse. Puedo patear más fuerte, puedo volar más rápido y me da la capacidad de ser más ágil en mis habilidades, así que está llevando todas mis habilidades a un nivel completamente diferente.