Uno de los hitos en la carrera de Robert Downey Jr. ha sido interpretar a Tony Stark, alias Iron Man, en diez películas diferentes. Sin embargo, hacer eso requiere un trabajo especial con el fin de no aburrirse uno mismo ni aburrir al público.
Según comentaron los directores Joe y Anthony Russo, que pudieron dirigirle en tres películas de Marvel Studios, en una entrevista reciente para Vanity Fair, Downey prefiere sacar las cosas del guión en un intento de sorprenderse a sí mismo y mantener frescos sus papeles.
Cuando regresa al set, Robert es famoso por tirar el plan por la ventana y subirse al sofá y lo que sea, como si se saliera del libro. Hace esto porque le gusta sorprenderse a sí mismo. Le gusta mantener las cosas frescas. Se guía por eso.
No hay otra manera de haber interpretado ese personaje en 10 películas a menos que estuviera haciendo eso. Robert ciertamente ha vivido una vida complicada. Entiende lo que está en juego, comprende las pérdidas, comprende los giros que puede tomar la vida entre altibajos. Siempre está buscando ese nivel de profundidad, ese nivel de complejidad. Creo que sabe que eso es a lo que venimos todos al cine en primer lugar.