En una entrevista reciente, Benedict Cumberbatch habló sobre el éxito de Spider-Man: No Way Home mientras compartió su emoción por la llegada de Doctor Strange en el Multiverso de la Locura.
Abordando el cambio de director de la secuela, que originalmente iba a ser Scott Derrickson y que luego acabó siendo Sam Raimi, Cumberbatch dijo que los fans se van a volver locos cuando se estrene la película. También dejó entrever que la película lleva el sello de Raimi por todas partes.
Una vez que se volvió cosa de Sam, siempre fue sobre hacerla una película de Sam Raimi. Vuestra cabeza va a dar vueltas.
Pero hablando sobre la tercera película de Spider-Man, Cumberbatch no ocultó que inicialmente tenía sus dudas acerca de cómo iba a resultar el proyecto. Específicamente, mencionó que el Presidente de Marvel Studios dijo que era el futuro del cine, algo que para el actor resultó demasiado exagerado. Al final, admitió que fue un ignorante.
Creo que cuando Kevin Feige dijo primero, ‘Sabremos cómo será el futuro del cine, o de la experiencia de ir al cine, después de esta película’. Y dije, ‘Vale, todo el mundo está bebiendo demasiado por aquí’. Apareció mi ignorancia.