Si el Presidente de Marvel Studios Kevin Feige hubiese hecho las cosas siempre a su manera, habría hecho una película de Shang-Chi hace 20 años y no ahora.
Feige comenzó a trabajar en películas de superhéroes a principios de los 2000, y es ahí cuando empezó a pensar que un filme del Maestro de Kung Fu era buena idea.
Shang-Chi es una película que terminó en la lista de ‘Sería genial’ donde ‘No sería genial si pudiésemos hacer esto como película’, probablemente hace veinte años. Es una historia genial de un joven que se da cuenta de que su padre es esencialmente uno de los mayores súper villanos del mundo y uno de los mayores criminales del mundo. ¿Cómo procesas eso? ¿Y cómo tratas con eso cuando eres un niño? ¿Cómo evolucionas a partir de ahí?
Feige dijo que el director Destin Daniel Cretton era la elección perfecta para Shang-Chi y la Leyenda de los Diez Anillos debido a su experiencia con intensas historias centradas en personajes, películas que a menudo requieren presupuestos más pequeños que una típica súper producción de Marvel.
Eso fue genial, conducir la historia que queríamos explorar algún día. Buscando a un director para hacerlo fue, como siempre, importante, y vino Destin mostrando su talento. Es un director increíble que hace películas increíbles que han sido de tamaño presupuestario menor al de una gran película de Marvel, pero que venga a dar su visión de esta relación padre-hijo es especial.