A día de hoy aún no lo sabemos, pero en su día 20th Century Fox tuvo mucha prisa en hacer llegar X-Men: Primera Generación a los cines. Los rumores dicen que por la preocupación de que los derechos volviesen a Marvel, ya que siempre se ha dicho que Fox debía hacer una película cada cierto tiempo para evitarlo. El caso es que, como resultado, el director Matthew Vaughn solo tuvo 14 meses entre el estreno de Kick Ass y el de la nueva película de los X-Men.
Durante una entrevista reciente, la guionista Jane Goldman habló de la presión a la que se vio sometida por aquel entonces para terminar el guión de la película a tiempo. De hecho, recuerda que Vaughn y ella tuvieron que hablar sobre la película en la habitación de un hospital, ya que la mujer del director, la modelo Claudia Schiffer, acababa de dar a luz.
Quería tener el guión escrito en tres semanas mientras entraban directamente en pre-producción. Recuerdo que él y yo nos reunimos en la habitación de hospital de ella. Fue muy tolerante. Yo me iba a casa y escribía durante 16 horas al día. Recuerdo estar en unos momentos muy frenéticos con el tiempo apretando y Matthew ya estaba empezando a buscar sets y actores. Lo recuerdo como un jaleo enorme.
Curiosamente, X-Men: Primera Generación fue un éxito, y muchos fans y críticos consideran la película como una de las mejores de la franquicia.