En una entrevista reciente, el actor Sebastian Stan habló sobre los rumores que salieron entre Capitán América: El Soldado de Invierno y Capitán América: Civil War, que sugerían que había cambiado tanto físicamente de una película a otra que no le servía el brazo prostético original.
Stan explicó que usó un nuevo brazo mejorado en cada película y que la primera iteración requería lubricante para poder ponérselo debido a que era de tubos metálicos rígidos.
Era como tener un enorme martillo pegado a mí, pero tenía un aspecto increíble en la película, y de hecho fue parte de mucho de mi lenguaje corporal.
Al final, Stan admitió que hizo demasiado músculo como para poder usar ese brazo.
Me sentía muy inseguro estando por ahí con esos tipos jodidamente enormes, así que empecé a hacer pesas realmente duro y a comer mucho. Recuerdo aparecer, y estaba un poco más grande de lo que estuve en El Soldado de Invierno. El brazo me quedaba un poco ajustado. Me cortaba la circulación.
Después explica que los siguientes brazos eran más móviles, y que Stan ya no necesitaba lubricante para poder ponérselos. De hecho, para The Falcon and the Winter Soldier ya hay una manga dentro del brazo.