El año pasado se estrenó la última entrada de Bryan Singer en la franquicia de los X-Men, X-Men: Apocalipsis, que lamentablemente no fue todo el éxito que a 20th Century Fox le habría gustado. La película tuvo unos 200 millones de dólares recaudados menos que su predecesora (543 millones en total), y la crítica no estuvo de su lado.
Después de este decepcionante resultado, la franquicia pareció recuperarse con los aclamados spin-offs Logan y Deadpool, una tendencia que se espera que continúe con Los Nuevos Mutantes y X-Men: Dark Phoenix.
Después de obtener el primer vistazo y los primeros detalles de X-Men: Dark Phoenix, Entertainment Weekly ha publicado una profunda entrevista con el director/guionista/productor Simon Kinberg y con el productor Hutch Parker sobre la recepción de X-Men: Apocalipsis y los errores que se cometieron con la película.
Kinberg apuntó rápidamente al error principal:
Creo que nos desviamos de lo que siempre había sido la piedra angular de la franquicia, que son estos personajes. Se volvió algo sobre destrucción global y efectos visuales por encima de la emoción y los personajes.
Parker ofreció detalles adicionales, admitiendo esencialmente que el guión aún estaba en desarrollo durante la producción, lo cual nunca es buena señal. También añadió que la película llegó en un momento donde el género de los superhéroes estaba evolucionando hacia algo mucho más grande, y desafortunadamente, en ese momento no fueron capaces de evolucionar del mismo modo.
Siempre es peligroso si tu guión está evolucionando mientras estás rodando. Ciertamente, a posteriori, todos sentimos que el género ha estado evolucionando estéticamente y en tono, y esta película no lo hizo. Hay muchas cosas que creo que son muy buenas en la película, como conjunto, que era luchar para encontrar formas de unirse, era narrativamente emocional y en términos de trama. Estéticamente, se sintió un poco desfasada comparando con una evolución que se ha estado viendo en todos los demás sitios. Aprendimos mucho de eso.
Pasando a X-Men: Dark Phoenix, el foco de atención principal de Kinberg era rectificar los errores que cometió con su predecesora y trabajar hacia corregir el curso de la franquicia para los fans de la saga.
Una de las cosas que quería hacer con esta película es obviamente centrarme en los personajes y darles emociones reales para jugar y salir con un tema que la hiciera sentir relevante y necesaria para el mundo de hoy.
Para completar los detalles, Sophie Turner adelantó una aproximación mucho más terrenal para la secuela, pero también adelantó que habrá acción de otro mundo.
Es muy oscura y también hay muchas cosas fantásticas en esta película con las que queríamos conectar realmente con todos los miembros del público que la viese, así que también teníamos que hacerla muy real. Todavía tienes esa sensación de escapismo cuando la gente empieza a volar, pero hay mucha realidad en ella. Creo que afectará realmente a la película. Y la forma en la que Simon la ha rodado, la mayoría de esta película es cámara en mano, como con Steadicam.
Kinberg continúa y recuerda cuál fue su propuesta inicial para la secuela.
Las imágenes de referencia fueron mucho imaginería del mundo real. Todo, desde el material de desastre real hasta los rayos reales, parecen como cuando golpean el suelo. De lo que hablé con los intérpretes, la fotografía y los efectos visuales era la necesidad de que todo pareciese orgánico y que vive en nuestro mundo, con el fin de hacerlo sentir relevante de nuevo y no tan extremo.