Aunque Kick-Ass fue todo un éxito, su secuela no corrió la misma suerte. En una entrevista reciente, Matthew Vaughn reconoció que siguió adelante con Kick-Ass 2 por motivos comerciales, y el cambio de director a Jeff Wadlow no le sentó tampoco demasiado bien a la película.
De hecho, para Wadlow supuso un gran bache en su carrera de director, y Vaughn siente que habría pasado lo mismo con la suya si hubiese hecho una continuación de X-Men: Primera Generación. Sus ideas para la franquicia eran diferentes a las de Fox y Bryan Singer, incluyendo la película comentada en otra entrevista sobre un joven Lobezno. En esta ocasión, Vaughn hasta nombra a Tom Hardy para el papel.
Cuando la terminamos, recuerdo decirle a Simon Kinberg y Emma Watts: ‘Chicos, esto parece que debería ser la tercera de la trilogía. Es un gran concepto. Por qué no hacer otra, una ambientada en los años 70 con un joven Lobezno, y después la tercera es Días del Futuro Pasado, donde ves al joven Lobezno con, digamos que Tom Hardy, junto a Hugh Jackman y todos los demás personajes juntos’. Para mí, ese es el final de la trilogía. ¿Cómo superar eso? Y me dijeron que no, y cuando estoy en mi arenero no me gusta escuchar que no si creo que es una buena idea. Adoro a Bryan, y pensé, ‘¿Sabes qué? Voy a cederle el testigo a él’. BRyan fue lo suficientemente bueno para darme a mí el testigo. Y corrí con él, y no se cayó, y lo devolví.