Por muchas razones, incluyendo no alcanzar las expectativas de los fans de los cómics, X-Men: Apocalipsis no consiguió conectar ni con el público ni con la crítica, algo que se busca corregir con X-Men: Dark Phoenix. Un primer paso para llegar a esa meta es basar la película en un arco argumental clásico muy querido por los fans, a pesar de que ya haya sido adaptado más o menos en X-Men 3: La Decisión Final.
Sin embargo, las esperanzas de una adaptación fiel a la historia de los cómics, con los héroes viajando al espacio, parece que se van al traste. Aunque no parece que sea algo que podamos descartar definitivamente, recientes comentarios del director Simon Kinberg dejan ver que todo será bastante terrenal y no habrá Imperio Shi’ar o espacio exterior, diciendo que las películas de los X-Men que lleguen bajo su supervisión seguirán siendo humanas y emocionales.
Debemos encontrar una forma de ponerla con los pies en la tierra para que no sea demasiado intergaláctica.
