Cuando el director Jon Watts presentó su versión de la nueva película de Spiderman a Sony Pictures y Marvel Studios, se aseguró de que la diversidad formase gran parte de lo que quería poner sobre la mesa, y los dos estudios estuvieron de acuerdo.
En Spider-Man: Homecoming, personajes que han sido tradicionalmente caucásicos en los cómics como Flash Thompson, Ned Leeds o Liz Allen serán interpretados por actores de diversas etnias. Esto, como siempre, ha levantado ampollas entre los fans más puristas en su eterna búsqueda de la fidelidad absoluta con respecto al material fuente, pero es lo que Watts quería en su película y así lo cuenta en una entrevista reciente para ScreenRant:
Esto era una gran parte de mi presentación. Lo primero que hice fue un muestrario de cómo quería que fuese el mundo, cómo serían los chicos y cómo debería ser el instituto. Viví en Nueva York durante trece años y debería ser como una escuela en Nueva York, no debería ser como una escuela en el medio oeste en los años 50. Así que saqué un puñado de fotos de chicos y fotos de documentación de chicos en escuelas, y eso fue parte de mi presentación y todo el mundo estuvo realmente de acuerdo y siguió con ello en mente durante el casting, el cual fue genial, me encantan los críos.
Cuando estaba dando forma al reparto para la película, Watts dijo que no miraba el color de la piel y que quería a los mejores actores para los papeles en cuestión.
Nos poníamos a grabarlos y a veces era, hubo algunas situaciones donde un chico era simplemente genial y no había un papel específico para él porque es un instituto y podemos tener a muchos chicos. Fue una oportunidad para decir, ‘Bueno, este chico es genial, no tenemos un papel específico para él pero quizás deberíamos crear un papel pequeño para él o pensar en una forma de incorporarle en otra capacidad.