Muchas películas tienen problemas a la hora de presentar el origen de un solo personaje, pero James Gunn se las arregló para hacer lo propio con cinco y de forma exitosa en Guardianes de la Galaxia.
Hablando durante el Festival del Gremio de Guionistas, Gunn dijo que fue más fácil hacer Guardianes de la Galaxia Vol. 2 porque estaba libre del estrés provocado por los segmentos introductorios de la primera película.
En la segunda película tuve mucha más libertad. Debido a que la primera película lo hizo bien y fue genial no tener que explicar los cinco personajes principales al público en la primera media hora, pudimos ir directamente a la historia.
A pesar de coger prestados ciertos elementos de la primera entrega, Gunn insistió en que la secuela es distinta en lugar de seguir de cerca la fórmula de su predecesora.
Esto tiene que ser su propia cosa y no puedes empezar a hacer esta mierda de Xerox de la primera.
Cuando le preguntaron con qué Guardián se sentía más identificado, Gunn no se cortó a la hora de admitir que el mapache es el que ocupa un lugar especial en su corazón.
Rocket es el personaje con el que me identifico más que nadie. Rocket soy yo. Tiene problemas de ira como yo y tiene la misma poca habilidad para aceptar el amor que yo.
