Una de las mayores críticas hacia la serie de televisión Iron Fist es que el actor que da vida al protagonista de la serie, Finn Jones, no fuese un experto en artes marciales. Esto se tradujo en unas escenas de lucha que no son especialmente impresionantes y muchos cortes y ediciones.
Obviamente, esto no quita que Jones se haya esforzado y haya hecho todo lo mejor que ha podido, habiendo sido sometido a un duro entrenamiento previo y teniendo que aprenderse las coreografías en mucho menos tiempo del que habría deseado debido a problemas de agenda. Esto es lo que comenta en una entrevista reciente para Metro:
Pero en realidad estuve aprendiendo las escenas de lucha como 15 minutos antes de que se rodaran porque la agenda era muy ajustada. Así que 15 minutos antes, el director de especialistas me hablaba durante la coreografía y yo simplemente saltaba a ello directamente. En realidad era un bautismo de fuego y aprendí en el trabajo y lo llevo haciendo durante 12 meses. Con práctica, solo mejoras y mejoras tratando con ese tipo de agenda.
Jones también afirmó que no tuvo tanto tiempo para entrenar para el papel como le habría gustado.
Para empezar, fue muy intenso. Cuando me mudé por primera vez a Nueva York, antes de empezar a rodar, tuve tres semanas de entrenamiento de preparación en artes marciales muy intensas y pesadas. Pero después desafortunadamente, una vez que empezó la serie, la agenda de rodaje era muy ajustada, estaba trabajando 14 horas al día, seis días a la semana, por el día y por la noche, por la noche y por el día, y de hecho me agenda no me permitía continuar el entrenamiento tanto como habría deseado realmente.