Nadie duda que la película Cuatro Fantásticos fue un completo desastre desde el principio hasta el final. Actualmente, la película tiene un 9% en Rotten Tomatoes y existe mucha documentación sobre la pesadilla que fue hacerla. La película está rodeada de muchos rumores sobre problemas tras las cámaras entre el estudio y el director Josh Trank, y contó con un tono deprimente que se alejó mucho de sus raíces en los cómics. Poco después del estreno, el estudio eliminó del calendario la secuela planeada para 2017, sugiriendo que el futuro de la franquicia era muy negro.
Sin embargo, parece que 20th Century Fox no desiste. El productor Simon Kinberg, que también co-escribió la película, ha admitido los errores del filme en una nueva entrevista para Den Of Geek.
No hicimos una buena película, y el mundo votó, y creo que probablemente votó correctamente. Y no puedes hacer una buena película todas las veces, no lo hace nadie. De hecho, tenemos un muy buen promedio, considerando todas las cosas. Pero creo que cometimos muchos errores cuando se hizo esa película, errores de los que aprendimos y que no repetiríamos.
A pesar de la terrible recepción, Kinberg mantiene que el estudio quiere hacer otra película de la Primera Familia con el mismo reparto.
Queremos hacer otra película de los Cuatro Fantásticos. Nos encanta el reparto, quiero decir que si te lo tuviese que decir ahora, Michael B. Jordan, Miles Teller, Kate Mara y Jamie Bell son grandes actores, nos encanta ese reparto. Me encanta el cómic, quiero decir, me encanta casi tanto como los X-Men.
Kinberg dice que el estudio tiene en mente la secuela, y que buscarán un tono mucho más luminoso que gustará a los fans del cómic.
Intentaremos ser más fieles a la esencia del tono de los Cuatro Fantásticos, que es completamente, bueno no completamente pero sí mucho, distinto a los X-Men, que es un tono más luminoso, divertido y más optimista. Creo que intentamos hacer una película de los Cuatro Fantásticos más oscura, que pareció una idea radical pero que mezclamos con el ADN del cómic en lugar de ser fieles al ADN del cómic.
