Nueva semana y nuevo episodio de Agents of S.H.I.E.L.D. Y, por tanto, nueva reseña que os traemos en Espacio Marvelita. Porque somos así de generosos.
En este caso, hablamos del capítulo 12 de esta tercera temporada, titulado The Inside Man. Para variar un poco, este episodio se centra en una única misión. Si la semana pasada nos quejábamos de que abusaban de la fórmula de dividir a los personajes en dos equipos para dos tramas diferentes, esta semana nos sorprenden, y ahora ya entendemos por qué abusan de esa fórmula. Este episodio posiblemente haya sido de los más insulsos de lo que llevamos de temporada, y es que el estreno de esta tercera temporada hizo promesas que no están sabiendo mantener. Obviamente, todo esto siempre desde el punto de vista de quien escribe.
Muchos personajes han quedado fuera de juego en este nuevo episodio, especialmente las parejas FitzSimmons y Daisy/Lincoln, cuyo rol en el episodio se ha visto reducido a permanecer en la base de S.H.I.E.L.D. con escasas apariciones. Y el pobre Mack no ha tenido ni ocasión de salir en pantalla.
Hablando sobre los que sí tuvieron minutos, hay que decir que May ha compensado su escasa participación en el episodio anterior, algo que siempre se agradece. Sin embargo, también han tenido ocasión de tener más minutos Bobbi y Hunter, una pareja que no termina de gustar a este fan. Se sigue desperdiciando un personaje con gran potencial como es Pájaro Burlón. ¡Por las barbas de Odín, que fue una Vengadora! Y, por supuesto, protagonismo absoluto a nuestro siempre querido Director Coulson.
La trama, aunque interesante y con algún giro inesperado, no deja de ser un parche para la trama general de la serie. Realmente, poco aporta a lo que parece que está por venir. Más allá de servir para aliviar la relación entre el General Talbot y Phil Coulson, cuya tensión era divertida, no ha aportado mucho más. Ah, sí, ha convertido a un villano clásico y temible de Marvel, el Hombre Absorbente, en un sirviente de una buena causa.
Otra cosa que ha conseguido este episodio es confirmarnos lo que ya todo sabíamos: los Inhumanos son los mutantes del UCM. No hay más que escuchar las declaraciones de Coulson en su faceta de falso doctor: «no son alienígenas, está en sus genes. Son gente con un poder extra«. ¿De verdad hacía falta usar esa palabra? La palabra más clave del mundo mutante, la que da nombre a la Patrulla-X y al Gen X. Entiendo que se busque la similitud entre ambos grupos y es buena idea tratar a los Inhumanos como a los mutantes, pero usar esa palabra es casi ofensivo.
En fin, como podéis haber ido intuyendo por lo ya escrito, este capítulo no es que haya sido fruto de mi devoción. Esperemos que solo sea la calma antes de la tormenta. Y que pronto veamos como ese, supuestamente, poderoso Inhumano que posee el cuerpo de Ward pone a nuestros agentes contra las cuerdas. Hace falta algo más de tensión y de drama, pero afortunadamente sabemos que esta serie puede conseguirlo.
Por cierto, por si os lo estabais preguntando, de los 5 miembros de la reunión que acompañaban a Coulson y Talbot, solo me consta que el nombre de Ellen King haya aparecido en algún cómic. Pero poco parece tener que ver su contrapartida con esta versión. Si a alguno le suena algún otro nombre, estoy deseoso de saberlo.
Bueno, os toca mojaros. ¿Creéis que la serie mantiene su buen nivel del inicio de temporada o coincidís conmigo en que estos dos últimos capítulos han sido algo más flojos?