Uno de los puntos fuertes de la segunda temporada de la serie de televisión Daredevil es la llegada de los personajes Punisher y Elektra, de eso no cabe ninguna duda.
Según el showrunner Doug Petrie para Entertainment Weekly, empezaremos ya a empatizar con el violento vigilante cuando comience la temporada mientras intenta acabar con los criminales de Nueva York.
Los espectadores que vean la serie tendrán el origen de este tío con un arma, pero también vamos a forzar a la gente,al igual que lo hicimos con Matt, a imaginar por sí mismos. Tomarse la justicia letal por tu cuenta en la América de 2015 es una mierda complicada. No nos hemos asustado por la rica y compleja realidad del ahora. Si has conseguido un arma y no eres la policía vas a incitar sensaciones fuertes. Estamos incitando a que eso pase y estamos al tanto de los titulares de donde vivimos, y estamos intentando hacer que la gente piense.
A esto, el co-showrunner Marco Ramírez añade:
Matt es un católico devoto, y raramente ves a un personaje en televisión que sea devoto de algo. Frank tiene un Código Hammurabi. Es como soltar a un gran tiburón blanco en el agua.
El actor Jon Bernthal también habla sobre qué hizo para prepararse para el papel mientras la revista, aparentemente, confirma que el personaje no llevará la famosa calavera en el pecho con el fin de permanecer de incógnito.
La gente me ha estado parando en las calles de Nueva York diciéndome, ‘No jodas esto’. Este personaje está relacionado con las fuerzas de la ley y el ejército. Ha traído la guerra a casa con él de la peor forma posible. Y lo mejor sobre él es que si te ofende, le da igual.
Finalmente, parece que Matt Murdock se acercará aún más a Karen Page, pero hay que tener en cuenta que Elektra se dejará caer por la Cocina del Infierno.
Matt es un tipo complicado y profundamente moral, y ella es la mejor peor novia que posiblemente puedes tener. Hace todo mal y atractivo, es su identificación, su lado salvaje. Matt siempre está domesticando su lado salvaje. Elektra simplemente lo deja salir. Ambos se ven profundamente repelidos y atraídos por eso.
