Ian McKellen es un actor que ha tenido la fortuna de interpretar a varios de los personajes más míticos del cine y otros medios, tales como Sherlock Holmes, Gandalf o Magneto.
Es precisamente este último el que más nos interesa, y al que ha dado vida en varias entregas de la franquicia X-Men. Sin embargo, tal y como ha revelado él mismo para la revista People, estuvo a punto de no obtener el papel.
Al parecer, todo comenzó cuando rechazó un papel en Misión Imposible 2 porque no le dejaron leer el guión completo de la película.
Bueno, no podía juzgar por la lectura de solo aquellas escenas cómo era el guión. Así que dije que no. Y mi agente dijo, ‘No puedes decir que no a trabajar con Tom Cruise’, y yo dije, ‘Creo que lo haré’.
Al día siguiente, Bryan Singer le ofreció el papel de Magneto, y después Peter Jackson le ofreció el de Gandalf. McKellen aceptó ambos, pero tuvo problemas con la producción de la primera X-Men.
Después, la primera X-Men de Bryan Singer se excedió en su preparación. Tuvo que retrasarse, retrasarse, retrasarse, retrasarse. Así que tuve que llamar a Peter Jackson y decirle, ‘Lo siento. No puedo interpretar a Gandalf por X-Men, con la que alcancé un acuerdo primero, está desbordada’. Y Peter Jackson dijo, ‘Bueno, voy a dejarlo de tu mano. Manténme informado’. Se lo conté a Bryan Singer y él dijo, ‘Bueno, debes hacer Gandalf. Me aseguraré de que esto salga a tiempo’.
Al final, Singer lo consiguió, aunque con tan solo tres días de margen para que McKellen pudiese viajar a la Tierra Media. Ahora bien, ¿qué habría pasado si el actor hubiese aceptado el consejo de su agente y hubiese hecho Misión Imposible 2?
Mientras tanto, Misión Imposible fue postergada, postergada, postergada. Y si hubiese decidido hacerla, no habría estado en X-Men y no habría estado en El Señor de los Anillos.