Hace varios días que nos hicimos eco de la publicación del libro Joss Whedon: The Biography, en el que obviamente se hace un repaso a la vida y la carrera del director y guionista.
En un extracto de ese libro, se muestra un fantástico intercambio de correos electrónicos entre Tom Hiddleston, que interpretó a Loki en Los Vengadores, y Whedon después de que el actor hubiese leído el guión para la película.
Es interesante ver como, nada más leer el guión, Hiddleston ya destaca algunos momentos que después se convertirían en varias de las escenas preferidas por los fans, como el famoso «Puny god» que le dice Hulk a Loki.
Joss, estoy tan emocionado que apenas puedo hablar.
La primera vez que lo leí cogí como si fuera Charlie Bucket buscando un billete dorado escondido detrás del chocolate en el envoltorio de una barrita Wonka. No sabía por dónde empezar. Como un actor clásico me puse a buscar a Loki en todas las páginas, saltando adelante y atrás, leyendo palabras sin ningún orden en particular, imprimiéndose los diálogos como titulares de periódico en mi cabeza: ‘amenaza real’; ‘reverencias’; ‘descontento, nada es suficiente’; ‘su sonrisa no es más que un destello de su calavera’; ‘dios enclenque’.
… Gracias por escribir mi Hans Gruber. Pero un Hans Gruber con súper poderes mágicos. Como interpretado por James Mason… Es una gran villanía operativa junto a una serie de bromas indiferentes y desechables; además de la ‘amenaza real’ y su bien guardado maletín de dolor. Es grande, épico, majestuoso, poético, lírico, malvado, rico, fantástico y posiblemente podría ser el papel más gloriosamente divertido que he estado a punto de interpretar. Es simplemente excitante.
Me encanta cómo a lo largo de esto continúas poniendo a Loki en alguna especie de pedestal de magnificiencia real y después lo derribas con consistencia. Es maltratado, golpeado, condenado, arrastrado, le gruñen, le agitan y todas las veces que se da la vuelta está sonriendo, de forma malvada, ni por un segundo pierde su elocuencia, estilo, humor, auto-exaltación o grandeza, y nunca parodias ni niegas su inteligencia real. Que le guste hacer una entrada; que tenga gusto por los grandes gestos, los grandes discursos, el espectáculo. Podría no ser imparcial, pero me siento como si me hubieras escrito el mejor papel.
… Pero en realidad solo te estoy enviando una transanlántica nota de salida, cosas que tradicionalmente los actores británicos probablemente no hacemos. Es épico.
¿Y qué hay de la respuesta? Pues una muy simple, pero igualmente consistente.
Tom, este es uno de esos correos electrónicos que guardas para siempre. Muchas gracias. Es más elocuente (y posiblemente más largo) que el guión. No podría estar más encantado con tu reacción, pero también te diré que aún estoy trabajando en él… Gracias de nuevo. Estoy muy orgulloso de que te haya gustado. Diversión absurda como resultado.
Saludos, (incluyendo el poco característico choque de puños), Joss.
Fuente | Business Insider