Según informa Radar Online, una fuente les ha revelado que Robert Downey Jr. tiene un lucrativo acuerdo con Marvel de cinco años de duración que le llevará a participar en dos películas más de los Vengadores durante los próximos cuatro años, además de participar como consultor en futuras entregas de la franquicia de Iron Man (¿significa esto que dejará de ser Tony Stark?).
Pero Robert está levantando las cejas con sus esfuerzos en nombre de sus longevos compañeros Jodie Foster y Mel Gibson.
Quiere meter a Mel y Jodie en el Universo Cinematográfico de Marvel, preferiblemente en las películas de los Vengadores. Ha sido un sueño de Robert desde hace mucho ayudar a Mel y Jodie a alcanzar alturas de recaudación similares a las que él ha conseguido en los últimos años.
Aunque no habría problema con que Foster se uniese al reparto de Los Vengadores 2: La Era de Ultrón, la fuente comenta que lo de Mel Gibson podría ser una historia diferente.
Marvel está dirigida por uno de los hombres de negocios israelí más ricos y prominentes de Hollywood, y puedes estar seguro de que aunque Robert se arrodillase y suplicase, no habría lugar para Mel en las películas de Marvel.
Downey Jr. ya dejó caer la idea de que Gibson interpretase al Presidente de los Estados Unidos en la reciente Iron Man 3, pero la idea fue descartada. Aún así, el actor no se ha rendido:
Robert hace mucho por trabajar con sus amigos. Ashley Hamilton y el director de Iron Man 3, Shane Black, han comentado en varias ocasiones que Robert tuvo mucho peso en su contratación.