[Crítica] Masacre. El videojuego

Carátula de Masacre para Xbox 360

Carátula de Masacre para Xbox 360

Que la popularidad de Masacre viene en un aumento exponencial desde hace varios años, eso nadie lo puede negar. En los cómics tiene serie regular propia, aparece en varios equipos y ya son clásicas sus portadas alternativas rindiendo «homenaje» a varios de los memes más extendidos por internet. Con 20th Century Fox pensándose desde hace tiempo si hace o no la película basada en el personaje de Marvel Comics (quizás finalmente lo veamos en el filme de X-Force), era raro que alguien más no aprovechase el tirón.

Ese alguien ha sido Activision, que con la ayuda de High Moon Studios en el apartado de desarrollo, se han embarcado en la aventura de poner en las casas de los jugadores un videojuego protagonizado por el Mercenario Bocazas. Obviamente, se trata de un movimiento inteligente a la par que arriesgado, porque aunque ya comentamos que es un personaje muy popular, lo es entre los aficionados al cómic, pero fuera de este mundillo apenas le suena a nadie. Es, por tanto, dura la tarea de, por un lado satisfacer a los exigentes fans de los cómics en general y el personaje en particular, y por otro aportar un juego de calidad que atraiga a aquellos para los que Masacre es un completo desconocido.

En primer lugar, un videojuego de Masacre no sería tal si no adoptase la estética y la actitud graciosa, descarada, violenta e incluso faltona a la que el personaje nos tiene acostumbrados. Y, por supuesto, no puede faltar esa característica inconfundible de toda obra del Mercenario Bocazas: la rotura de la cuarta pared, que viene a ser que el personaje sea consciente de que está en un cómic/videojuego/película y se comunique con el lector/jugador/espectador. Pues bien, todo esto lo tiene, así que la captura de la esencia del personaje está conseguida, cosa importante. Ahora solo falta analizar cómo es el juego en sí, pero ya os adelantamos que, como mucho, no va a salirse de la media.

Juego de Masacre, Deadpool

Masacre es un juego de acción, un Beat’em Up en 3D sin excesivas novedades, sin riesgo y sin nada que le haga destacar sobre el resto de títulos del género. Bueno, casi nada. Por un lado tenemos un juego donde la premisa es repartir leches sin más, de forma bastante repetitiva y lineal por una serie de escenarios bastante sosos y poco interactivos, y contra unos enemigos clónicos que apenas gozan de inteligencia artificial. Para ello bastarán cuatro botones: uno de golpe débil, otro de golpe fuerte y un tercero que sirve para esquivar. El cuarto botón es el de «movimiento especial», algo que recuerda a los títulos del género de antaño, y que sirve para limpiar la pantalla de enemigos cuando nos veamos en aprietos serios. Además, se permite el uso de varios tipos de armas, y se pueden llevar a cabo ataques tanto con arma blanca cuerpo a cuerpo, como con armas automáticas y semi-automáticas a distancia. Todo dependerá de lo que elijamos hacer según la situación y el enemigo al que nos enfrentemos.

Juego de Masacre, Deadpool

Afortunadamente, de vez en cuando se rompe esta monotonía con los enfrentamientos contra los clásicos jefes finales de este tipo de juegos, con ligeros toques de plataformas o incluso con el uso de vehículos, aunque de forma automática. Pero seamos sinceros, esto no es suficiente.

Imagen del videojuego Deadpool

Como intento de aportar «un algo más», a medida que avanza el juego se pueden ir mejorando características o se pueden conseguir armas nuevas a base de recoger objetos específicos, aunque todo de forma muy básica, como si fuese algo de obligada inclusión porque ya casi es un estándar en el género. Además, el juego no supone ningún reto, porque la dificultad en general no es mucha, pero queda de manifiesto desde un principio que esto tampoco es lo que se busca. El objetivo es claro y conciso, presentado de forma directa, sin miramientos y sin andarse por las ramas: diversión, desenfreno, humor loco y acción sin límites.

Imagen del videojuego Deadpool

Esto último es sin duda lo mejor del juego, lo que le salva de caer en el olvido, lo que le diferencia ligeramente del resto de títulos mediocres del género, porque a pesar de los muchos puntos negativos, el tono es lo que empuja a seguir jugando las 8-10 horas que puede durar el juego. Masacre, como buen Mercenario Bocazas desequilibrado y sin vergüenza, se pasa todo el rato hablando. Sus diálogos están en inglés, pero en esta ocasión se agradece, porque el doblaje de Nolan North es de lo mejor del juego, y a sabiendas de ello, en Acvivision decidieron mantenerlo en versión original, aunque cuenta con subtítulos en español.

Deadpool

A esto añadimos la brutal violencia característica de este mutante, sumado a las referencias sexuales, los tacos y las faltadas. No es que esto sea lo más adecuado para un videojuego dirigido a público en general, pero bien es cierto que, sin esto, Masacre no sería Masacre. Pero lo más destacable, como siempre en su caso, es lo del tema de romper la cuarta pared. Como comentamos anteriormente, Masacre sabe que es un personaje de cómic que está en un juego desarrollado por High Moon Studios y distribuido por Activision. Comenta las jugadas directamente con el usuario, se queja, se ríe, bromea e incluso habla de la calidad del título y lo compara con otros. Puntazo.

Otro punto a tener en cuenta, aunque esto solo para los fans de los cómics y de Marvel en particular, es la buena cantidad de cameos que se producen. Están los anunciados durante la campaña de promoción previa al lanzamiento, como son Dominó, Pícara, Lobezno, Mariposa Mental o Cable, pero hay más, y se disfruta del momento en el que hacen acto de presencia.

Juego de Masacre, Deadpool

Finalmente, como añadido, no está de más tener en cuenta que se ofrece un modo de juego además del modo principal de Campaña. Se trata de una serie de Desafíos que, aunque no aporten demasiado, podrían servir para alargar unas horas más la vida del título, y más cuando los resultados de estos desafíos se pueden subir a internet y comparar con otros jugadores en tablas clasificatorias. Más allá de esto, lo que hay es lo que os hemos contado.

En el apartado técnico, Masacre es un juego de lo más normal que te puedes echar a la cara. El motor gráfico sobre el que está basado es el Unreal Engine 3, y lo cierto es que este no es uno de los mejores resultados que se han obtenido con el uso del citado motor. Si bien el juego es visualmente correcto y fluido en su animación (aunque se nota mucho la diferencia entre el personaje protagonista y el resto del juego), todos sabemos que se podría haber exprimido un poco más su apartado gráfico. Al menos en High Moon Studios sabían con qué trabajaban, y se han esforzado por darle a todo un aspecto general de cómic, incluyendo las cámaras y el uso de bocadillos y onomatopeyas.

Videojuego de Masacre, Deadpool

El sonido, pese a contar con ese estupendo doblaje de para Masacre, está bastante por debajo de lo que cabría esperar. La música es aburrida y repetitiva, casi prescindible, y los efectos chirrían cuando ves que se repiten los mismos sonidos para cosas diferentes. Un tanto cutre, sí señor.

En definitiva, Masacre se destapa como un juego hecho única y exclusivamente para los fans del personaje. Los que le conocen, encontrarán todo lo que es él en este título, y es muy probable que, aunque no lleguen a pensar que es el mejor juego de la historia, sí que lo disfruten por captar toda la esencia que era necesaria e incluso obligatoria. Sin embargo, a decir verdad, el juego como tal es bastante mediocre, y es una auténtica pena que no se haya sabido aprovechar el enorme potencial de un personaje tan diferente y carismático como Masacre para lanzar un videojuego de igual calibre.

¿Disfrutable y/o recomendable? Sí, sobre todo si eres fan de Marvel en general y de Masacre en particular. Para el resto, quizás resulta entretenido las primeras horas, pero seguramente acabe aburriendo.