Patty Jenkins podría haber sido despedida y Natalie Portman se enfada

Natalie Portman

THR ha publicado un extenso artículo detallando lo que podría haber ocurrido realmente en el asunto de la renuncia de Patty Jenkins a dirigir Thor 2. Según sus fuentes, la cosa podría no haber sido tan simple como «diferencias creativas», y Jenkins podría haber tenido que irse porque desde Marvel podrían haber pensado que las cosas no se estaban moviendo lo suficientemente rápido, a pesar de que ni siquiera hay un guión terminado.

También dicen que uno de los miembros del reparto que repetirá en la secuela no está del todo contento con esta decisión. Hablamos de Natalie Portman, que parece tan profundamente disgustada que ha llegado a pedir a Marvel que den una oportunidad a Jenkins. De hecho, esto podría ser la gota que colme el vaso, porque la actriz estaba considerando no aparecer en la secuela debido al reciente nacimiento de su hijo, llegando incluso a plantearse dejar de actuar durante unos años, pero la contratación de Jenkins hizo que se decidiera a participar en el proyecto.

Aunque ambas partes publicaron que se separaron el 6 de diciembre de forma amigable debido a diferencias creativas, fuentes dicen que Jenkins fue despedida sin advertencia de un trabajo que habría supuesto que fuera la primera mujer en dirigir una película de superhéroes de primera línea. La noticia salió a la luz antes de que nadie se la dijera a Portman, que ha pedido insistentemente a Marvel que contrate de nuevo a la directora de Monster (2003). Según las fuentes, Portman comenzó a cuestionarse si quería seguir actuando (posiblemente durante unos años) debido a que quiere pasar tiempo con su bebé, que nació el pasado junio. Se dijo que Portman se reenganchó a Thor 2 por la participación de Jenkins, y se sentía especialmente orgullosa de interpretar un papel en la apertura de puertas a una mujer para dirigir semejante película. La ganadora de un Oscar está obligada contractualmente a permanecer en el proyecto y se dice que Marvel Studios está trabajando a contrarreloj para resolver la situación, incluyéndola incluso en las conversaciones sobre a quién  contratar en lugar de Jenkins.