Sony también tuvo presencia en la Comic Con de Nueva York, donde presentó tres de sus próximas películas, Desafío Total, Underworld 4 y la que supuso el mayor evento y que es además la que más nos interesa, Ghost Rider: Espíritu de Venganza.
El panel contó con la presencia de los directores de la película, Mark Neveldine y Brian Taylor. Antes de que se mostrara un solo minuto de material de la propia película, se pudo ver algo del particular estilo de rodaje de los directores, con Neveldine en patines sujeto a vehículos a altas velocidades o colgado de unos cables para rodar secuencias a cámara lenta.
Después de estas curiosas imágenes, fue hora de mostrar un nuevo tráiler en 3D de Espíritu de Venganza. Esta vez se muestra un poco más de la historia, que gira en torno al personaje de Idris Elba, un monje guerrero que se aproxima a Blaze por una misión sagrada de protección. También tenemos un vistazo a algunos de los villanos de la película, incluyendo a Ciarán Hinds como el diablo y Johnny Whitworth como el malvado matón que después se convierte en el némesis del Motorista Fantasma, Blackout, un personaje que es realmente fiel a la versión del cómic (piel clara, pelo blanco, etc.).
En el tráiler queda claro que esta película será un versión más oscura del personaje, si lo comparamos con la primera parte. Blaze es ahora un esclavo del hambre del diablo por dispensar justicia, y eso es algo que hace en abundancia.
En la posterior ronda de preguntas, Neveldine y Taylor revelaron algunos pequeños detalles de la película. Espíritu de Venganza se hizo como película no recomendada para menores de 16 años. Los directores sabían que tenían que encajarla dentro de la calificación del estudio, pero encontraron formas de entrar dentro de lo que pedían sin sacrificar diversión, lenguaje soez o escenas de acción y violencia.
Bromearon con que Nic Cage aparentemente huele a galletas de vainilla, pero es una de las personas más oscuras que han conocido, para aquellos que piensen que el actor no es más que un chiste andante.
Ambos directores están convencidos de que la conversión posterior en 3D es lo que quieras hacer de ella. Como Taylor explicó, decir que una película que se convierte a 3D después de ser rodada es mala, y que la propia conversión en 3D posterior es mala, es como decir que el CGI es malo en una película que has visto, y después decir que el CGI en general es malo. Explicaron que no podrían haber usado material 3D para rodar la película debido a que para su estilo necesitan «material de guerrilla», aunque sí que investigaron mucho para hacer de la conversión posterior una parte fuerte de la experiencia.
Alguien sugirió que la pareja debería hacer Masacre. Ambos afirmaron que ya había alguien a cargo del proyecto (Tim Miller), aunque para ellos los fans son libres de mostrar sus opiniones en internet.
