Spider-Man: Turn Off the Dark, el famoso musical que todos pensábamos que iba a fracasar estrepitosamente después de los desastres que llevaron a su completa remodelación, parece que al fin comienza a ver la luz. El espectáculo recaudó 1,7 millones de dólares la semana pasada, una cifra que está ligeramente por encima de los 1,2 millones de dólares que habían estimado los productores como necesaria para que el espectáculo fuera viable.
Dicha recaudación sirvió para que el show se colocase como tercero en la lista de musicales de la semana, por detrás de los incombustibles Wicked y El Rey León.