El actor inglés, que será el protagonista del reinicio de Spiderman de Sony, se muestra autocrítico a la hora de abordar el papel y lo denomina como una experiencia drástica. Garfield reconoce que el cambio será notable en la nueva película, y espera estar a la altura de las expectativas de los fans.
Irónicamente, voy a estar en boca de todos, ‘Mierda, ¿por qué escogieron a este idiota inglés?’. Veo esto como Hamlet o cualquier obra de Shakespeare. Todo actor a interpretar al Rey Lear de forma distinta porque todo actor es una persona diferente.
Creo que va a ser realmente duro. No sé qué esperar de todo esto. Definitivamente, será una forma diferente de trabajar y mi interpretación va a suponer un cambio. Simplemente voy a hacerlo como si fuese un corto de Spiderman que está rodando un amigo mío. Es como tengo que hacerlo o perderé la cabeza.
Al final se sabrá el año que viene. La idea de entrar en una habitación e intentar convencer a alguien de que mi contratación es contraintuitiva, ponerse en la habitación correcta y conocer a la persona correcta, y todas esas cosas que sientes que son demasiado extremas para hacer pero que de alguna forma te encuentras haciendo en esas habitaciones.
Es imposible que cuando te ves en pantalla te veas bien, porque todos nosotros sabemos que cuando grabas tu voz en un reproductor de cinta y la reproduces, te da vergüenza porque no suenas igual.
Exagerando hasta multiplicarlo por cien, eso pasa con tu cara, y con tus ojos, y con tus cejas y con tu estúpida personalidad.