En base a la eterna lucha por conseguir el máximo dinero posible, la 20th Century Fox, empresa que parece destinada a destruir todo tipo de obra susceptible de adaptación al cine, ha decidido que no está del todo a gusto con el resultado de X-Men Origins: Wolverine y ha puesto en marcha de nuevo a todo el equipo de la película para rodar de nuevo algunas escenas del filme.
Este hecho nos llevaría a pensar directamente en el desacuerdo durante el rodaje entre el director, Gavin Hood, y la productora en la forma de hacer la película. Sin embargo, Hugh Jackman ha salido ha la palestra para comentar que se trata de escenas que no habían podido rodar debido a conflictos en las agendas del reparto.
Lo más probable, es que las declaraciones de Jackman sean ciertas, ya que el productor Lauren Shuler Donner ya afirmó en octubre en una entrevista que en enero se rodarían algunas de las escenas de la película.
Por su parte, la FOX ha liberado una nueva imagen promocional en la que aparecen varios de los personajes que se podrán ver a partir del 1 de mayo en Estados Unidos.